En mi diócesis desde hace años se intenta caminar, como lo pide el Magisterio Latinoamericano hacia una nueva configuración de las parroquias.
Se trata de crear verdaderas comunidades integradas por muchas Pequeñas Comunidades Parroquiales.
Sin embargo, en un amplio porcentaje del clero, encontramos escasa disposición para una auténtica conversión pastoral que haga posible su surgimiento.
Esta dificultad se hace presente también en sectores de la vida consagrada y en los miembros de los grupos y movimientos apostólicos.
Sin embargo, los laicos que se han acercado a la Iglesia en las parroquias que sí lo están intentando dan un testimonio maravilloso y alentador...
¿Por qué es tan difícil la conversión pastoral?